Libro 69/365: “La mente no escolarizada” de Howard Gardner
Como criar a los niños (y no, no son adultos en miniatura)
Libro 69/365
Nombre del libro: La mente no escolarizada. Cómo piensan los niños y cómo deberían enseñar las escuelas (original: The unschooled mind. How children think and how schools should teach).
Autor: Howard Gardner
Año: 1997 (esta edición en español de 2008)
Páginas: 292
¿Cómo llegó a mi biblioteca?
De adolescente me interesó mucho la teoría de las inteligencias múltiples. También el concepto de inteligencia emocional que divulgó Daniel Goleman. Cuando me enteré que ambas tenían de origen el trabajo de Howard Gardner empecé a prestarle atención y por eso no dudé en comprar este libro para conocer más en detalle su propuesta pedagógica.
Qué me pareció (7/10)
Después de leerlo citado o glosado tantas veces, pude finalmente leer sin intermediarios al autor. Hoy soy un poco más escéptico de los gurúes en todos los ámbitos: descreo por ejemplo que se pueda aplicar un marco diseñado por un académico de Harvard -como Gardner- en una escuela pública porteña sin desafiar supuestos y sesgos para adaptarlo y hacerlo viable.
El libro tiene tres partes: la crianza del niño, las instituciones educativas y las propuestas del autor -para las que se para sobre los hombros del enfoque cognitivo de Jerome Bruner y de la pedagogía de la comprensión de Lawrence Cremin-. Muchos de los conceptos son tal vez ya parte del statu-quo en la bibliografía de capacitación docente: enseñanza constructivista a partir del conocimiento previo, ir de la memorización a la comprensión, abandonar la evaluación simplista como el multiple choice para determinar el conocimiento de un tema. Cuando hice unos módulos para docente universitario en 2010 nos instruían bajo esos mismos conceptos, aunque la vieja escuela sigue muy presente en todos los niveles educativos.
Me gusta que hable de intensidad de inteligencias y que las poseemos en distinto grado. Que sean siete es arbitrario (creo que se sumó una octava hace unos años) pero es enriquecedor sumar lo interpersonal, lo intrapersonal, lo lingüístico, lo espacial y lo corporal a lo lógico-matemático. De alguna forma más que una innovación es recuperar lo perdido (volver a las fuentes de la La Academia de Platón y de tantas escuelas clásicas mucho más armónicas en sus contenidos que las actuales).
Me gusta el recorrido que hace en los niños y de cómo Darwin se da cuenta que no son adultos en miniatura. Piaget y Chomsky atraviesan toda la primera parte. En la segunda divide entre la educación basada en competencias -habilidades para la vida-, enciclopedista -memoria- o comprensión, la que recomienda Gardner. Y la tercera parte ya es un bastante más etérea con grandes proyectos que suelen ser más utopias que aplicaciones concretas en escala.
Cuenta cómo en el siglo XIX a las disciplinas tradicionales se sumaron las ciencias (química y física), las ciencias sociales (historia y geografía) y las lenguas modernas. ¿Qué aportó el siglo XX? ¿Y el XXI? En los últimos años se viene impulsando la programación y la robótica como solución a todos los males de la educación y de la empleabilidad. Harían mejor repensando los contenidos, la formación y la selección de docentes en base a estudios y aportes como el de Gardner.
Citas preferidas
“La mayor parte de nuestro conocimiento es ingénito o innato; como tal, simplemente necesita ser activado o estimulado más que adquirido o construido de un modo más activo.” (Chomsky)
“Somos criaturas de nuestra cultura como creaciones de nuestro cerebro.”
“Nada está en el intelecto que primero no esté en los sentidos, excepto el intelecto mismo.” (Leibniz)
“La inteligencia está repartida por un igual en el entorno y en la cabeza, y el alumno inteligente hace uso de la inteligencia distribuida en su entorno.”
“Lo que se ha perdido no son sus habilidades decodificadoras, sino dos facetas distintas: la capacidad de leer para comprender y el deseo mismo de leer.”
“Ayudarlos a asumir su propia responsabilidad de su aprendizaje futuro.”
“Una clase de tercer grado de Pennsylvania se centraba en el estudio de una única pintura, Las Meninas de Velazquez, durante todo un año.”
“Encantador niño ocupado placenteramente, / bromeamos de tus frágiles esfuerzos / Pero entre nosotros, dime, ¿qué son más sólidos, / Nuestros proyectos o tus castillos.” (Lapecié)
¿Tenés otros libros del autor?
No, pero leí alguno más de él (la temática es siempre parecida). Tengo esperándome en mi Kindle su memoria intelectual: A Synthesizing Mind.
¿Te tomarías un café con el autor?
¡Por supuesto! Sería lindo visitarlo en Harvard, donde fue investigador y docente hasta 2019, para escucharlo disertar sobre sus ideas mientras caminamos en un campus como el que suele verse en las películas.
¿A quién se lo recomendarías?
A quien le interese la educación y quiera un compendio de ideas de pensadores reconocidos en este tema, con el recorte e impronta que le da Gardner. Hay que ver si en los últimos veinticinco años desde su publicación hubo algún avance significativo en la investigación que modifique algunos de los conceptos que se plantean.
Veredicto: se queda.
Me llamó la atención la cantidad de anotaciones que tiene. Debe ser de los libros más intervenidos por mi inquieto lápiz negro.